Hace tan sólo dos meses nos sorprendió un gran Terremoto en Japón: el 11 de marzo de 2011.
Hoy, 11 de mayo de 2011 la província de Múrcia (España) ha sufrido dos terremotos de importante magnitud, de 5, 2 y 4,4, provocando la muerte de (hasta el momento) 10 personas y grandes destrozos que han mobilizado a todos los servicios de emergéncia, incluídos los militares para ayudar a las más de 10.000 personas que han salido a la calle por temor a más réplicas.
¿Tenían los estudios sismólogicos de Bendandi fundamento y algún error de cálculo le hizo creer que el terremoto tendría lugar en Roma, en lugar de otra población mediterránea?, ¿o todo ha sido fruto de la casualidad?
Quizás nunca lo sepamos con certeza, pero en todo caso la profecía que ha alertado y atemorizado esta mañana a los ciudadanos romanos contrasta con la sorpresa y el desconcierto vivido en la región Murciana a consecuencia de un movimiento sísmico que nadie esperaba.
Seguiremos con el corazón encogido por esta tragedia y enviamos los mejores deseos para que las personas recuperen la tranquilidad y sus vidas en lo que sea posible.
Lo de la profecía de Roma me parece una chorrada (perdón por decirlo así),después de todo lo que se montó en 1999 este tipo de cosas me parecen absurdas, igual que lo del 2012. No podemos predecir los terremotos, sólo esperar que no nos toque experimentar ninguno como ha tocado en Murcia, en Japón, etc.
ResponderEliminarPetonets
ANIMO para la gente de Lorca.....
ResponderEliminarMe temo que por ahora no es posible predecir los terremotos. Parece ser que es algo muy difícil, pero nunca se sabe si en el futuro llegaremos a predecirlos. La cuestión sería la antelación para que la predicción fuera útil. Una alarma en una gran ciudad con poco tiempo igual sería más dramática que el propio terremoto.
ResponderEliminarY como cuando pasó lo de Japón, también quiero dar ahora mi apoyo a la gente que ha sufrido este nuevo seísmo.
Besos
Yo vi a mediodía lo de la profecía sobre Roma y me reí y luego aluciné con lo del terremoto en Lorca y le comenté lo mismo a Manuel, que a ver si el señor ese se había equivocado un poco; lo dije medio en broma, medio en serio, porque menuda casualidad, ¿no? Entonces fue él el que se rio y me dijo lo mismo que Enrique en su comentario, que un terremoto es imposible de predecir.
ResponderEliminarNo creo en profecías (siempre digo, con retintín, que si no creo en el dios católico, que es el verdadero... menos en cualquier otra creencia), son crueles casualidades...
ResponderEliminarMi afecto para la población de Lorca!!
Un abrazo.
Los terremotos los están estudiando mucho, pero por ahora todavía no pueden predecir exacto.
ResponderEliminarMi apoyo para todos los españoles!
Besos
Lamenté mucho lo que pasó, impresionan mucho las imágenes de la torre derrumbándose por televisión.
ResponderEliminarUna lástima las pérdidas humanas y de patrimonio cultural.
No sé si creer en la predicción, creo que más bien fue una casualidad.
Besos.
Yo tampoco he creído nunca en profecías ni premoniciones pero hay que reconocer que es una casualidad que pone los pelos de punta.
ResponderEliminarUn beso a tod@s.
Por problemas con blogger veo que han desaparecido todos los comentarios. Yo decía que mucho me temo pero creo que predecir los terremotos resulta por ahora muy difícil, y que si en el futuro se pudiera llegar a conseguir aún existiría el problema de qué hacer si no hay suficiente tiempo como para evacuar a toda una población de forma ordenada. Quizás las consecuencias de la alarma serían peores que el propio terremoto.
ResponderEliminarTambién mandaba, como hice con el seísmo de Japón, mi apoyo a todos los habitantes de Lorca.
Besos
Bueno, veo que aquí también se borró el comentario que te dejé...En fin...el mundo del blogger¿? incomprensible para mí.
ResponderEliminarTienes razón...los números unos parecen estar relacionados, y porque no has seguido...
Me uno a ese corazón encogido por la tragedia. Y también, fortalece y emociona ver la respuesta social que hay...desde lo pequeño y sencillo.
Un abrazo, Guacimara!!
Cierto, veo que Blogger también se tragó mi comentario. Estaba hambriento el otro día por lo que se ve.
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