"Berlín y los berlineses se han caracterizado al largo de la historia por su "open mind"", nos explicó con esa gracia característica de las chilenas, Alexandra, nuestra guía al comenzar la visita de 5 horas que disfrutamos gratamente nuestro primer dia en la capital alemana.
Y es que Berlín es una ciudad que no te deja indiferente. Lo primero que me llamó la atención de Berlín es la immensidad de sus avenidas y el constraste de su arquitectura. Sin tener el encanto de otras ciudades europeas, es innegable el valor historico que tiene esta ciudad que ha sido en varias épocas el centro neurálgico político de Europa e incluso del mundo (Reino Prusiano, creación de Alemania como unión de sus regiones, Segunda Guerra Mundial, el Holocausto, Hitler, La Guerra Fría entre EEUU y URSS, etcétera).
A parte de la Puerta de Brandenburg, el monumento a las víctimas del Holocausto, el famoso muro y el "Checkpoint Charly", hay infinidad de cosas interesantes para visitar: el Tiergarten con su antíguo zoo, un montón de museos, la cúpula del Bunderstag desde la cual se ve todo la ciudad, Charlotensburg Schloss, Sanssouci, y un largo ecétera.
Si os apetece podéis ver las fotos que seleccioné de las más de 600 que hicimos en tan sólo unos días! Las ordené por días y las podéis ver aquí: 1 - 2 - 3 - 4.
Antes de ir, y por recomendación de una compañera de trabajo leí "El violí d'Auschwitz" de Mª Àngels Anglada sobre el Holocausto, que me encantó. Y para el viaje escogí de entre mis libros "La adúltera" de Theodor Fontane.
Ambientada en el Berlín de la segunda mitad del siglo XIX, La adúltera es una de las grandes «novelas de mujeres» de su autor. Melanie de Caparoux, descendiente de una familia de la nobleza suiza, está en apariencia felizmente casada con el acaudalado consejero comercial Van der Straaten, 25 años mayor que ella. Cuando en su vida aparece el joven Ebenezer Rubehn, Melanie no puede evitar comparar los refinados modales y la cultura de éste con los de su rudo marido. Lentamente, su creciente inclinación hacia Rubehn la empuja al divorcio, que en aquella época traía aparejado el rechazo de la sociedad e incluso de los propios hijos. A partir de la historia de un triángulo amoroso, Fontane traza el retrato de una mujer de rasgos modernos, que es capaz de descubrir en su cómoda y convencional existencia burguesa una gran trampa vital y que se decide a dar el paso que la alejará de esa sociedad «para rehacerse a sí misma» y desprenderse así del «sentimiento mezquino que va asociado a toda mentira».
La historia arranca cuando el señor Van der Straaten adquiere un cuadro para la villa que tiene río abajo en el Tiergarten. Cuando Melanie observa las figuras centrales del cuadro lo reconoce como "L'adúltera" de Tintoretto y le pregunta por qué ha escogido precisamente ese, un cuadro peligroso... Él le contesta que lo quiere tener ante sus ojos, como memento mori, que prefiere tener su destino siempre presente y familiarizarse con él. A ella no le gusta nada esa idea que tiene su marido y le contesta con otra frase hecha que dice "no hay que pintar al diablo sobre la pared". De toda manera, a ella la adúltera del cuadro le parece commovedora, que hay inocencia en su culpa, que todo está predestinado, que ella ha llorado porque de tanto repetirle hasta la saciedad lo mala que és ahora se lo cree. Sin embargo su corazón se resiste y no puede creerlo...
Aunque la editorial la describe como "magistral relato de uno de los grandes novelistas del XIX alemán" y "minucioso retrato psicológico de una mujer en busca de sí misma" a mí personalmente este libro me ha dejado bastante fría. Melanie no me pareció nada más que una mujer joven, bonita y caprichosa, que siempre ha tenido todo lo que ha querido en la vida hasta que llega a la madurez y se da cuenta que aquello que siempre quiso es insustancial. Así que decide apostar por su felicidad poniéndose en contra de su esposo, su familia, sus amigos e incluso su círculo social. Pero esa decisión, aunque sincera y directa, conlleva apartarse de sus dos hijas a las que no parece echar de menos demasiado durante todo el año que se dedica a viajar y vivir su amor. No comprendo del todo la razón de Melanie para no ver antes a sus hijas y dejarlas tan al márgen. Cuando las ve, es normal que las niñas la rechacen...
Más comentarios del libro: http://www.abretelibro.com/foro/viewtopic.php?t=13673
Guacimara:Como siempre digo, que bueno tus comentarios de viajes... uno va acompañandote con las fotos. Interesante lo que comentas del libro, sobre el amor de madre (?).
ResponderEliminarUn gran abrazo
El libro que me mandastes lo estoy leyendo, lentamente por falta de tiempo, y me gusta mucho!!!!
Geniales tus entradas de viajes Guacimara. Tengo muy pendiente Berlin y acerca del libro...en ello estoy. Besotes
ResponderEliminarQué lindo debe ser tener al alcance de la mano lugares tan bellos. Nosotros tenemos otro tipo de turismo al alcance, más de bellezas naturales, pero las ciudades europeas guardan tanta historia en cada rincón que deben ser una delicia.
ResponderEliminarAbrazos.
me encantan tus entradas sobre viajes, lo explicas todo tan detalladamente que nos transportas contigo en cada aventura viajera.
ResponderEliminarun fuerte abrazo.
Me gusta cómo vas combinando las lecturas con los viajes.
ResponderEliminarImagino que Berlín no debe defraudar, ya sólo por ser sede de tantos hechos históricos debe ser maravilloso estar ahí. Es la primera vez que oigo que se les caracteriza por lo de ''open mind''.
El libro de ''la adúltera'' sólo por el título me resulta frívolo, pero el argumento me resultó muy atractivo... uy, jejeje! Ese tipo de lecturas me suele gustar también.
Si supieras que estoy enganchada a esa canción donde sale Pattinson, de el grupo ''The XX'', la pongo una y otra vez... lo que consiguen las imágenes, ¿verdad? jejejeje!
Petonets.
Eliane, que bueno que esté leyendo el libro! Quizá te acompañe estos días de viaje por Córdoba?
ResponderEliminarWinnie, en cuanto puedas aprovecha para visitar Berlín, merece la pena.
Luciana, en Argentina tenéis una riqueza natural impresionante que alguna vez me gustaria poder disfrutar... para los viajes de fin de semana o poquitos días prefiero ciudades europeas. Los viajes para disfrutar de la naturaleza lo reservamos para verano, con 10 o 15 días para recorrer lagos, acantilados, montañas y demás parajes con tranquilidad...
LadyDarcy, es una manera más para no perder en la memória esos lugares y momentos vividos. Un beso.
Patricia, lo de "open mind" solo se refiere a Berlín, que se sale de la norma, pues el resto de alemanes se caracterizan por sus "cabezas cuadradas" jeje! No te imaginas el cachondeo que se traían mi chico y nuestro amigo con el título del libro, relacionándolo con nuestros viajes a Londres y días extras allí, jeje! No me extraña que estés enganchada a esa canción, yo tambien!!!
Entiendo que Melanie quiera ser feliz pero ¿no puede compaginarlo con todo lo que le rodea? Muchos libros suelen ser demasiado tajantes con el tema y optan por una solución "radical" sino mira Madame Bovary ;)
ResponderEliminarMe ha encantado lo que has explicado de Berlín, sabía que tenía una mentalidad más abierta que el resto de Alemania.
Creo que lo se cachondean es de los dos días extras, esta no quiere volver! ;)