Se trata de una comedia (comedia??? pues me pareció más un drama!) en tres actos concluida en 1915 y publicada y estrenada en 1918. La obra sólo pudo ser estrenada gracias a los esfuerzos del escritor Stefan Zweig en una traducción alemana en agosto de 1918 en Munich. La representación fue un fracaso y las críticas desfavorables. La producción significativa de la obra fue la que dirigió el dramaturgo inglés Harold Pinter en Londres en 1970, con gran éxito. La crítica empieza entonces a ver a Joyce como un precursor de creadores como Samuel Beckett y el propio Pinter.
Una de las causas principales por la cual "Exiliados" no fue bien recibida, ha sido que Joyce pone en escena un conflicto pasional cuyo eje principal es la relación entre el amor, los celos y la duda. La situación de los protagonistas ofrece un obvio paralelismo con la vida de Joyce y Nora y la clara inspiración en la desconfianza de Joyce en la fidelidad de Nora. Un supuesto amigo de Joyce, le insinuó alguna vez que Nora solía salir con él en 1904 los días que no estaba con Joyce. Afortunadamente Joyce fue a ver a otro amigo, J. F. Byrne, quien le dijo que todo era mentira. Joyce le creyó y esta versión le fue confirmada luego por su hermano Stanislaus. El tema de la fidelidad y la traición ya había sido tratado con relación a Irlanda, y a pesar de haber aclarado lo dicho por Cosgrave, utilizó esta experiencia en "Exiliados". Otro tema de la vida real que parece haber contribuido en la composición de la obra, fue la relación entre Joyce y el director de "Il Picolo della Sera", Roberto Prezioso, quien se sirvió de su amistad con Joyce para acercarse a Nora. Al igual que Richard en "Exiliados", Joyce sabía lo que estaba ocurriendo, pero en parte por razones "artísticas", alentaba a Nora a continuar. La situación finalmente se hizo insostenible para Joyce e intolerable para Prezioso. Todo acabó en un ataque de celos en el que en plena calle y llorando con arrepentimiento, Prezioso le dijo a Joyce lo que pasaba.
El argumento de "Exiliados" transcurre en 1912, en una casa en las afueras de Dublín, donde viven, con su hijo de 8 años, el escritor Richard Rowan y su mujer Bertha. Ellos han estado fuera de Irlanda mucho tiempo y regresado ese mismo año. Rowan no está legalmente casado con Bertha, ella es social e intelectualmente inferior a él pero ha sido para él su "novia en el exilio" y lo ha sostenido en los momentos más difíciles. Por él lo ha dejado "todo": la religión, su familia y su "propia paz.". Es la figura gracias a la cual él ha llegado a realizar sus aspiraciones artísticas. El periodista Robert Hand, primo de Bertha, está enamorado de ella, pero es amigo de Richard y nunca antes se ha atrevido a confesar sus sentimientos. Richard siempre lo supo, y si bien ama a su esposa, alenta a su esposa para que ella y su amigo lleguen hasta el final de esta situación. Por momentos, parece estar jugando con la incertidumbre respecto de la fidelidad de ella. Beatrice, prima de Robert, ha sido la compañera "intelectual" de Richard, una larga correspondencia entre ambos lo atestigua. El alcance de este vínculo se expresa por momentos en forma ambigua...
Algunas frases de Robert y de Richard están casi literalmente sacadas de cartas de Joyce a Nora de 1909. Robert y Bertha acuerdan un encuentro en la que fue la casa de soltero de Robert. Richard se entera y llega antes que su mujer, pero solo para decirle a su amigo que lo deja en libertad para obrar como le parezca. Cuando llega Bertha intercambian confesiones y palabras tiernas, pero el acto concluye sin que sepamos qué es lo que llega a ocurrir realmente entre ellos. Al día siguiente Bertha le dice a su marido que no ha pasado nada malo. Poco importa lo que ocurrió realmente, Richard nunca lo sabrá...
El alma femenina es nuevamente capturada por Joyce con exquisita precisión. Bertha se decide a seguir el juego propuesto por Robert y alentado por su propio marido con la intención de saber si es real la "libertad" que le asigna su marido y si con eso pretende tener él la misma libertad. En el fondo, Bertha desea descubrir cuál es lugar de Beatrice en el deseo de Richard, y si algo de lo que haga lo empujará a los brazos de ella...
En este diálogo con Robert, Richard pretende renunciar al amor de Bertha:
Robert: ¿Crees tener derechos sobre ella, sobre su corazón?
Richard: Ninguno.
Robert: ¿Y por lo mucho que has hecho por ella no reclamas nada?
Richard: No.
Y Robert se dispone a renunciar a la lealtad a Richard para poder conquistar el amor de Bertha:
Richard: Lo sé todo. Lo he sabido desde hace algún tiempo.
Robert: ¿Desde cuándo?
Richard: Desde cuando empezó esto entre Bertha y tú.
Robert: Sí, estaba loco. Pero fue una simple irresponsabilidad. Admito que pedirle a ella que viniese esta noche fue un error...
Dejarse arrastrar por el destino que le propone Richard es también una renuncia de Bertha, un dejar de ser, un exiliarse:
Richard: (Con creciente excitación) Bertha, acepto lo que tenga que ocurrir. He confiado en ti y seguiré confiando.
Bertha: Solo para tenerlo contra mí y poder dejarme después. (Casi con pasión) ¿Por qué no me defiendes de él? ¿Por qué me abandonas ahora sin ninguna palabra? ¡Dick, por Dios, dime qué quieres que haga!
Como antecesora de Ulises, Exiliados ya anuncia la obsesión de Joyce por una temática compleja. Aquí el amor, los celos, y la traición son las pasiones profundas que mueven a los personajes, pero gracias al acierto de James Joyce, son puestos en evidencia tras una apariencia natural y sencilla.
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