AMANDA (dejando su taza sobre el plato; con gran vivacidad): Sabéis, pienso que viajar me gusta más que cualquier cosa en el mundo. Me proporciona siempre una fuertísima sensación de aventura. En primer lugar, la excitación de hacer las maletas, coger el pasaporte y todo eso. Después, la emoción de irse y coger el tren y el barco. Y al final, lo más emocionante de todo (levanta su copa) llegar a sitios extraños, conocer gente extraña, comer cosas extrañas… (Bebe)
ELYOT: …y hacer ruidos extraños.
(AMANDA se atraganta violentamente)
Private Lives, de Noel Coward
Como otras ciudades europeas, Londres ofrece a sus visitantes un sinfín de oportunidades y lugares para visitar y disfrutar. Y para Patricia, Laura y yo, esta ciudad es nuestra caja de Pandora. El motivo de esta visita fue volver a ver la obra "Private Lives" de Noel Coward, que tanto disfrutamos en el viaje de marzo. En cuanto se presentó la posibilidad las tres aceptamos en un abrir y cerrar de ojos, y aún temiendo que nuestras familias y amigos pensaran que estábamos locas, nos decidimos a repetir la experiencia.
Nos reunimos con Laura de madrugada en Victoria Station y nos acompañó al hotel "The Wellington", un hotel de estilo tradicional y edwuardiano muy chulo en Vincent Square. Al llegar a la habitación nos explicó las librerias y la tienda de juguetes que había visitado durante el día y nos enseñó su botín de libros.
A la mañana siguiente, un precioso día soleado nos animó a pasear por Pimlico en dirección al Tate Britain. Antes de que abrieran descubrimos un pequeñito cementerio que forma parte del Garden Museum.
Esta vez sí pude ver mis dos cuadros prerafaelitas preferidos: "Ophelia" de Millais(Hamlet, Shakespeare) y "The Lady of Shalott" de Waterhouse (poema de Alfred Tennyson), y recordar otros muchos igual de impresionantes(fotos). Patricia atrajo mi atención hacia un cuadro que me sonaba, pero no recordaba de qué. Resultó ser "Hope" de Watts, el cuadro que aparece en "In my father's den". Qué curioso encontrarlo aquí... Salimos sonrientes y satisfechas en dirección a Covent Garden.
Bullicio, un hombre disfrazado de perro dentro de una caseta, pequeñas tiendas, objetos de decoración, cuadros de gatitos, chocolatinas, típico "pie" de carne, música en directo con susto acompañado... todo ello creó el ambiente ideal para una agradable sobremesa.
Llegó la hora de ir al Vaudeville Theatre y de camino nos topamos con la placa que indica donde estuvo viviendo Jane Austen. Esta vez desde el gallinero, volvimos a disfrutar y reír a carcajadas con la disparatada historia de Elyot y Amanda, y la fantásticas interpretaciones y puesta en escena de los cinco actores. Tal como habíamos planeado en la media parte nos hicimos enseguida con un helado de vainilla Haagen Dazs. Mmmm! Quién puede resistirse a una voz así?
Llegó la hora de ir al Vaudeville Theatre y de camino nos topamos con la placa que indica donde estuvo viviendo Jane Austen. Esta vez desde el gallinero, volvimos a disfrutar y reír a carcajadas con la disparatada historia de Elyot y Amanda, y la fantásticas interpretaciones y puesta en escena de los cinco actores. Tal como habíamos planeado en la media parte nos hicimos enseguida con un helado de vainilla Haagen Dazs. Mmmm! Quién puede resistirse a una voz así?
Al salir del teatro, vimos el suelo humedecido por la lluvia como el cuadro de Logsdail que descubrimos esa misma mañana... Tras esperar en la Stagedoor bajo la lluvia un rato, desistimos en seguir mojándonos con la intención de volver y provar suerte en la sesión de noche. Es curioso como los Londinenses estan acostumbrados a la lluvia. Supongo que a la mayoría nos pilló con sandalias, vestidos veraniegos y camisetas de manga corta por el día tan bonito que hizo esa misma mañana. Pero aún así, se les veía tan frescos chorreando bajo la lluvia! Menos mal que nosotras hicimos caso de la previsión del tiempo y llevabamos paraguas.
Callejeando bajo la lluvia y mirando escaparates, descubrimos la tienda de antiguedades donde Javier Marías compró su gentlemen sin bailarina, jeje! Entramos chorreando en un par o tres de tiendas de libros de segunda mano en Charing Cross Road, antes de llevar a Patricia hasta el lugar donde estuvo la libreria del famoso libro de Helen Hanff, marcado, cómo no, con una plaquita (por lo visto existe una guia de placas de Londres!) Antes de coger el metro para volver al hotel a cambiarnos y entrar en calor, entramos en Waterstone's y compré mi primer libro de verdad en inglés: "The Duchess of Bloomsbury", que allí está editado junto a 84 Charing Cross Road. Nos llamó la atención ver en promoción "Any Human Heart". Me quedé con las ganas del precioso librito que compró Patricia, una edición de P&P con páginas doradas y ilustraciones del tamaño de un bolsillo. Me lo apunto para la próxima!
Una cenita en el hotel con sandwiches, capuchinos, muffings y scones de Starbucks, ropa de abrigo y de vuelta al Stagedoor bajo la lluvia. Esta vez Laura, inteligentemente, se quedó esperándonos en el hotel. Tras una hora bajo la lluvia, esquivando las salpicaduras de los coches al pasar por los charcos, vigilando atentamente la ya conocida puerta, nos informaron de que esa noche Matthew y Kim no iban a salir.
Maldita lluvia! Menos mal que en marzo tuvimos más suerte! Algo decaídas y empapadas, nos resignamos y volvimos a casa. Eso sí, sin perder nuestro buen humor y dejar constancia de ello mientras esperábamos el metro. No dicen que al mal tiempo buena cara? Pues eso! Cheers!
Domingo por la mañana amanece lloviendo. Nos enfundamos nuestros abrigos y paraguas y directas al V&A. En los corredores del metro caminamos junto a las familias con niños que se dirigen al Museo de Historia Natural y al de las Ciencias. Da gusto ver a esos nenes con sus papis y mamis yendo tranquilamente a visitar museos...
Les dejamos atrás y entramos en el museo de Victoria&Albert, como si fueramos Alicia en el país de las maravillas: estatuas, cuadros, tumbas, vestidos, muebles, cerámica, forja, cristalerias, joyas... de todas las partes del mundo y de todas las épocas... Y continuamos luego en la National Gallery Portrait donde pudimos ver los retratos de los escritores, pintores y políticos que previamente habíamos seleccionado (Keats, Austen, Dickens, Lord Byron...), pues íbamos con el tiempo muy justito. Por cierto, Laura quedó embelesada con John Constable. Dos museos completamente recomendables.
Y finalmente nos despedimos de Londres y de Patricia hasta la próxima! Esta vez no hubo ningun incidente en la vuelta a casa. Cogimos el bus a tiempo, comimos en Luton Airport y nuestro avión salió a la hora. Una vez en el avión, Laura y yo pudimos respirar tranquilas y immortalizamos el momento con gran satisfacción, jeje!
Callejeando bajo la lluvia y mirando escaparates, descubrimos la tienda de antiguedades donde Javier Marías compró su gentlemen sin bailarina, jeje! Entramos chorreando en un par o tres de tiendas de libros de segunda mano en Charing Cross Road, antes de llevar a Patricia hasta el lugar donde estuvo la libreria del famoso libro de Helen Hanff, marcado, cómo no, con una plaquita (por lo visto existe una guia de placas de Londres!) Antes de coger el metro para volver al hotel a cambiarnos y entrar en calor, entramos en Waterstone's y compré mi primer libro de verdad en inglés: "The Duchess of Bloomsbury", que allí está editado junto a 84 Charing Cross Road. Nos llamó la atención ver en promoción "Any Human Heart". Me quedé con las ganas del precioso librito que compró Patricia, una edición de P&P con páginas doradas y ilustraciones del tamaño de un bolsillo. Me lo apunto para la próxima!
Una cenita en el hotel con sandwiches, capuchinos, muffings y scones de Starbucks, ropa de abrigo y de vuelta al Stagedoor bajo la lluvia. Esta vez Laura, inteligentemente, se quedó esperándonos en el hotel. Tras una hora bajo la lluvia, esquivando las salpicaduras de los coches al pasar por los charcos, vigilando atentamente la ya conocida puerta, nos informaron de que esa noche Matthew y Kim no iban a salir.
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Maldita lluvia! Menos mal que en marzo tuvimos más suerte! Algo decaídas y empapadas, nos resignamos y volvimos a casa. Eso sí, sin perder nuestro buen humor y dejar constancia de ello mientras esperábamos el metro. No dicen que al mal tiempo buena cara? Pues eso! Cheers!
Domingo por la mañana amanece lloviendo. Nos enfundamos nuestros abrigos y paraguas y directas al V&A. En los corredores del metro caminamos junto a las familias con niños que se dirigen al Museo de Historia Natural y al de las Ciencias. Da gusto ver a esos nenes con sus papis y mamis yendo tranquilamente a visitar museos...
Les dejamos atrás y entramos en el museo de Victoria&Albert, como si fueramos Alicia en el país de las maravillas: estatuas, cuadros, tumbas, vestidos, muebles, cerámica, forja, cristalerias, joyas... de todas las partes del mundo y de todas las épocas... Y continuamos luego en la National Gallery Portrait donde pudimos ver los retratos de los escritores, pintores y políticos que previamente habíamos seleccionado (Keats, Austen, Dickens, Lord Byron...), pues íbamos con el tiempo muy justito. Por cierto, Laura quedó embelesada con John Constable. Dos museos completamente recomendables.
Y finalmente nos despedimos de Londres y de Patricia hasta la próxima! Esta vez no hubo ningun incidente en la vuelta a casa. Cogimos el bus a tiempo, comimos en Luton Airport y nuestro avión salió a la hora. Una vez en el avión, Laura y yo pudimos respirar tranquilas y immortalizamos el momento con gran satisfacción, jeje!
¡Qué genial! n_n Muchas muchas muchas cosas o.o
ResponderEliminar¡Y estoy de acuerdo! ¿Quién puede resistirse a esa voz? ¡Y al heladooooooooo!
Oh.. Hola! XD
Me encantan estas crónicas tuyas por Londres....para mi ciudad prácticamente desconocida hasta que llegué a tu blog. TENGO QUE VOLVER. Besos
ResponderEliminar¡Qué buena crónica! Me ha encantado. Y os cundió muchísimo, ¿no? Una pena lo de que no saliese MM, pero por lo demás y a pesar de la lluvia veo que lo pasásteis de maravilla. Me alegro :)
ResponderEliminarNo he visto nunca la Blue Plaque que pones de Jane Austen así que me ha gustado la foto que pones. Es una casa tan típica de la época de Jane Austen que casi esperas verla mirando por la ventana, ¿verdad?
Y por cierto, la lista de las blue plaques de Londres las puedes ver aquí: http://www.english-heritage.org.uk/server/show/nav.1499
Guacimara:Como disfruté esta entrada tuya! Lo que yo siempre digo... los comentarios de viajes son como para que uno también haga el viaje!!!!
ResponderEliminarEstaís las tres muy sueltas en los videos y fotos...me gustó! Patricia ya parece una comentarista, mostrando el folleto de entrada, bajo la lluvia! Y yo parezco española por la forma de hablar... jajaja
Un gran abrazo
Hacéis unos viajes de lo más completitos. ¡Geniales! Me laegro mucho por vosotras.
ResponderEliminarEl cuadro que has escogido es uno de mis cuadros simbolistas preferidos...¡es pura poesía! A mí me tendrían que despegar con espátula para que lograra salir de la tate, la National, el British... ¡Me quedaría hasta durmiendo entre sus paredes!
Tiene que ser una ciudad que guarde en cada esquina mil recueros que ya hemos visto, que nos suenan, que ya nos son familiares...
¡Maravilloso!
Star Seeker, bienvenid@! En el teatro pudimos disfrutar de la combinación de las dos cosas: el helado y su voz. Mmmmmm!
ResponderEliminarWinnie, me gusta viajar mucho pero no suelo repetir tanto como este año a Londres, aunque me ha encantado, la verdad.
Cristina, gracias por el enlace. Cómo solo teníamos un dia y medio nos hicimos una lista de las cosas que más nos interesaba ver y distribuímos el tiempo al máximo!
Eliane, aunque en el primer viaje conectameos enseguida, quizá se nos ve más "sueltas" porque ahora nos conocemos mejor.
Noelia, nosotras decidimos hacer visitas muy concretas de lo que más nos apetecia ver porque teníamos muy poquito tiempo. En tu caso necesitarias más dias para poder saborear a gusto esta maravillosa ciudad, sobretodo en lo que respecta a los museos.
Hermosos lugares y excelente crónica!
ResponderEliminarAl fin fueron a ver los prerafaelistas, me encantan.
Como no puedo ir, les sugiero lugares que me gustaría visitar. La próxima, tienen que pasear por Postman Park, un lugar que conocí por la película Closer. Donde hay placas que recuerdan a personas que murieron por salvar a otras.
Saludos.
Al detalle! Buena memorización de todo.
ResponderEliminarMe ha encantdo que pusieras el párrafo de Amanda de la obra y la voz de Matthew. ¡Muy bien!
Te lo has trabajado!
Uf! Hay cosas que en mi caso prefiero no contarlas en mi blog... decidí mencionarlas solamente, creo que ya te diste cuenta. :-)
Sí, el motivo del viaje fue la obra, pero Londres por sí ya es una motivación e iría un montón de veces sólo por pasear por allí.
Muchos besos.
Luciana, la primera vez no nos dió tiempo, pero la verdad es que el Tate Britain es un deleite que no se puede dejar perder. Aunque no tengo previsto volver a Londres en breve, anotada está tu recomendación. Gracias!
ResponderEliminarPatricia, el día que acabé la traducción encontré ese párrafo de Amanda hablando de los viajes que iba como anillo al dedo. Si hay algo que no te apetece que aparezca, dímelo por mail y rápidamente se arregla. Como dije en tu blog estos viajes a Londres nos han dado la oportunidad de crear una amistad que me encantaria mantener en próximos encuentros (Barcelona?, Chatsworth?), donde continuar compartiendo nuestra pasión por los libros, el arte y como no, todo el mundo Austeriano y de MM. Bikiños!
Me ha encantado la crónica, yo ya he empezado a colgar la mía y será larga porque me enrollo mucho y de momento sólo llevo el primer día.
ResponderEliminarNo me parece mal nada de lo que hayas escrito pero falta algo: no sólo me embelesó Constable, sino Duncan Grant, el amante de Vanessa, la hermana de Virginia Woolf. ¡Vaya dos!
Y por supuesto estaré encantada de veros a las dos, espero que muy prontito: en Barcelona, Girona, Chatsworth o en cualquier otro lugar... Petonets
Preciosa crónica!! Y me repetiré, pero os cundió mucho!!! La Tate Britain es una delicia...tengo que volver con más tranquilidad. La vi en otra ocasión que fui a Londres. Tenía ganas de leerte con más tiempo, porque sabía que me iba a gustar mucho descubrir todos los lugares que visitastéis.
ResponderEliminarLa placa de Jane Austen me encanta...la próxima ocasión que vaya no me la dejo perder.
Un abrazo!!! (parece que estaba en Londres paseando por sus calles, mientras te leía!!!)